¿Sufres de reflujo y acidez estomacal?

Según una investigación realizada por científicos de la Universidad de Stanford, los inhibidores de la bomba de protones (IBP) se asocian con una mayor probabilidad de ataque cardíaco y muerte (1), y esto se aplica incluso a aquellos que no tienen una enfermedad cardíaca. Aquellos que toman IBP tienen una probabilidad de 16 al 21% más alta de sufrir un ataque cardíaco, mientras que sus probabilidades de morir de enfermedad cardiovascular son 122% más altas.

Esto es según un estudio de los datos de salud en 16 millones de registros electrónicos pertenecientes a casi 3 millones de pacientes que habían utilizado las instalaciones médicas 

de Stanford y otras prácticas pequeñas en los Estados Unidos entre 1994 y 2012. Después de identificar a 297,000 individuos con reflujo ácido, la investigación comparó su frecuencia de ataque cardíaco y observó si tomaron uno de los seis IBP comunes: iansoprazol, esomeprazol, omeprazol, pantoprazol, dexlansoprazol, o rabeprazol. 

Esta es una muy mala noticia para aquellos que toman una de las más de 113 millones de recetas de inhibidores de la bomba de protones que se realizan en todo el mundo cada año. Aproximadamente 21 millones de estadounidenses usan los medicamentos, y las ventas mundiales de estos medicamentos con receta y de venta libre superan los $13 mil millones de dólares.

La acidez estomacal es bastante común, incluso entre individuos que se consideran ‘sanos’, y por muy incómoda que sea, no todos necesitan medicamentos para solucionarlo. Los IBP funcionan al bloquear la producción de ácido en el estómago y los médicos lo recetan casi en automático en aquellos que tienen enfermedad por reflujo gastroesofágico o ERGE, aunque hay otros métodos como la herbolaria y la modificación de hábitos alimentarios que funcionan sin los efectos secundarios.
 
Referencias

1. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4462578/ 

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