Lo Natural es un Sistema Complejo, lo sintético es una sobre simplificación que pierde sinergia.

Todo el proceso de aislamiento de proteínas de origen vegetal también puede tener consecuencias peligrosas para la salud humana. En la soya se encuentran muchos antinutrientes que pueden producir efectos nocivos para la salud, como trastornos digestivos, desequilibrios hormonales, enfermedades autoinmunes, obesidad, trastornos digestivos, afecciones neurológicas o reacciones inmunológicas. Especialmente porque la proteína de soya y de chícharo (guisante) que se usa principalmente en la mayoría de las carnes de origen vegetal se procesa en gran medida a través de un alto calentamiento, extracciones químicas y aislamientos de proteínas y ahora alteración genética, lo que genera compuestos que no se encuentran naturalmente en los alimentos para los que el cuerpo dificulta su proceso.

Finalmente, los productos animales creados artificialmente a veces carecen de varios nutrientes o beneficios naturales. Por ejemplo, la leche cultivada en laboratorio como la de BioMilq no puede variar su composición en respuesta a las necesidades del niño, como puede hacerlo la leche materna real. No contiene hormonas ni bacterias del microbioma de la madre y, lo que es más importante, no tiene anticuerpos, que son vitales para los bebés. Biomilq es solo la última repetición de los intentos corporativos de subvertir el plan de alimentación perfecto de la naturaleza. Ya en la década de 1930, los investigadores sospechaban que la fórmula comercial tenía una desventaja y estaba aumentando la mortalidad infantil. En 1939 Williams en Singapur y en 1970 Jelliffe en Jamaica sospecharon que la fórmula comercial estaba aumentando la mortalidad infantil en el Tercer Mundo. La lactancia materna siguió disminuyendo a principios del siglo XX, cayendo en 1970 por debajo del 10% en los EE. UU. El 'Grupo del Tercer Mundo' suizo y la 'Coalición de Acción de Fórmula Infantil' de los Estados Unidos vincularon la mortalidad infantil y el marketing de la industria en el Tercer Mundo.

Las carnes de origen vegetal, por otro lado, no cumplen con los requisitos nutricionales que cumplen los alimentos de origen animal real. La simple adición de proteínas, vitaminas y minerales aislados a las dietas no confiere los mismos beneficios para la salud que cuando estos nutrientes se ingieren como alimentos integrales, que contienen miles de compuestos que actúan en sinergia. Por lo que, las hamburguesas de origen vegetal no son más saludables que los productos animales incluida la carne roja.

Donnato de la O. El Caminante.

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Referencias:
https://understandingag.com/artificial-animals-part-2-the-hidden-dangers-of-processed-plant-proteins/
https://www.theguardian.com/lifeandstyle/2020/nov/14/i-want-to-give-my-child-the-best-the-race-to-grow-human-breast-milk-in-a-lab
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/25012139/
https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fsufs.2020.00128/full
https://www.cnbc.com/2019/07/03/are-beyond-meats-burgers-healthier-than-red-meat-dietitians-say-no.html
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