Historia de la hibridación del trigo y su impacto tóxico

Comer mucho trigo ha resultado ser un factor causal de grasa abdominal visceral, acné, problemas en articulaciones, artritis, intestino irritable, reflujo ácido, antojos, comportamiento adictivo, diabetes, problemas cardiovasculares, envejecimiento precoz, y enfermedades auto inmunes.
Con mucha frecuencia me argumentan: “la humanidad siempre ha comido trigo”, “mis abuelos comieron mucho pan y nunca les pasó nada”. Necesitamos aclarar que el trigo que se comen hoy es muy diferente, en términos bioquímicos, del trigo que había hace tan solo 50 años.

El Dr. William Davis, en su libro “Wheat Belly” hace un recorrido en la historia del trigo en la dieta humana, que data de hace 10,000 años. Él habla acerca de cómo el tipo de trigo que se comía hace 1,000 años era bioquímicamente distinto al que se come hoy. Y, de hecho, aún del que comían nuestros abuelos hace 50 años.
En un experimento de hibridación, “se identificaron 14 nuevas proteínas del gluten en la descendencia, que no se encontraban en ninguna de las plantas padre hibridadas”. Esto significa que el trigo moderno contiene nuevas proteínas de gluten completamente desconocidas, a las que el sistema digestivo humano no se ha adaptado para digerir apropiadamente.
Esencialmente, los empresarios de la agroindustria han hibridado fuertemente al trigo en las últimas cinco décadas para mejorar el rendimiento de sus cosechas y las características para el horneado, y jamás se les ha ocurrido, y si se les ocurrió, les ha resultado totalmente irrelevante el impacto que esto tenga en la salud pública al cambiar la estructura bioquímica del trigo.
Debido a esto, la sintomatología celíaca, entendida como una enfermedad autoinmune con intolerancia completa al gluten se ha incrementado cuatro tantos en los últimos 50 años.

Donnato de la O. El Caminante.

Referencias
 https://www.amazon.com.mx/Wheat-Belly-Revised-Updated-Weight/dp/1984824945
http://ecosalud.info/salud/el-lado-oscuro-del-pan-nuestro-de-cada-dia/

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